Después de la tormenta llega la calma
Después de la tormenta llega la calma. Esta “tormenta” sin duda ha sido de las grandes, insólita para los seres humanos que habitan nuestro planeta. De un alcance difícil de calcular a día de hoy. Nos deja cifras dramáticas a todos los niveles. Por eso mismo debemos sentirnos en la obligación de no olvidar, no podemos pensar que nada ha pasado. Debemos continuar siendo cautos, cívicos y respetuosos con los protocolos y medidas de seguridad. Se lo debemos principalmente a todos aquellos que se han marchado víctimas de esta desafortunada pandemia, a sus familiares y como no, se lo debemos a todos los que han hecho (y continúan haciendo) frente a los vestigios del COVID-19 desde sus distintos puestos de responsabilidad.
Nuestra provincia ha logrado alcanzar el primer nivel de la fase de desescalada. No obstante nuestros campos van a ir abriendo sus puertas de forma escalonada, bajo sus propios criterios e intereses. Eso sí, siendo extremadamente prudentes, cumpliendo al máximo nivel con las medidas y recomendaciones de los agentes responsables de la gestión de la epidemia.
Poco o poco se ven en el horizonte rayos de luz.
Una luz que ilumina nuestros campos de golf, que lucen como nunca y os esperan como siempre. Nuestros campos de golf están ansiosos de sentir el calor de su media naranja, los golfistas.
Nuestras instalaciones están preparadas, nuestro personal atento, con los protocolos recomendados y las medidas de seguridad y distanciamiento social puestas en marcha. Estamos deseando que llegue la normalidad, o la nueva normalidad, o lo que sea que se asemeje a una normalidad en todos los ámbitos de la vida tal y como la conocemos. Mientras llega, de lo que podemos estar seguros, es que el deporte del golf es de las prácticas deportivas que más y mejor garantizan un distanciamiento social. Además de los múltiples y conocidos beneficios físicos y psicológicos, que ahora más si cabe, se van a ver reforzados tras tan largo tiempo de confinamiento.
Esperamos que pronto, no solo puedan disfrutarnos los vecinos de nuestros municipios, ya que Cádiz tiene vocación de anfitriona y como gran anfitriona disfruta de tu compañía, de tu visita y de tu estancia. Ansiamos el momento de volver a estar a tu lado, golfista. Mientras tanto te rogamos que continúes siendo ejemplar como lo has sido hasta ahora. Mantén la fortaleza e ilusión.
Puedes estar tranquilo que nosotros estaremos esperándote con los brazos abiertos.